En el medio profesional usualmente alguien que acabo de conocer me da su tarjeta de presentación para ponernos en contacto en otro momento. Las tarjetas de presentación son una excelente forma de hacer negocios y afianzar contactos, pero personalmente tiendo a perderlas con facilidad pues no me gusta cargar con ellas en la billetera y si las dejo en mi casa o lugar de trabajo, luego no las encuentro cuando las necesito. Para no perder la información me veía en la necesidad de crear un contacto nuevo en mi teléfono ingresando los datos manualmente.
Por suerte la tecnología siempre está allí para ayudarnos en esos pequeños trabajos, y aplicaciones como Business Card Reader nos hacen el trabajo mucho más fácil. Esta app de ABBYY se encuentra disponible para Android, iOS y Windos Phone y su funcionamiento no podía ser más simple. Solo abres la aplicación, tomas una foto a la tarjeta de presentación y el reconocimiento de texto hace la magia. Business Card Reader puede reconocer los nombres de las personas, la empresa donde trabajan, sus teléfonos de contacto, correos electrónicos, direcciones, redes sociales y todo lo que encuentre en la tarjeta.
escanea la tarjeta tomando una foto o cargando una de la memoria del teléfono
Luego de realizar el reconocimiento, la información se puede verificar para ajustar los datos que fueron mal reconocidos y posteriormente guardar el contacto en la agenda de teléfono o en la agenda de aplicación. La aplicación cuenta con 2 versiones, una gratuita que tiene un límite de tarjetas que puedes fotografiar, y una paga con un número ilimitado de tarjetas.
Entre las funciones interesantes que pude encontrar en la versión paga que probé, tenemos la posibilidad de hacer un backup de los contactos a la memoria del teléfono o enviarlos por correo o wifi a otra persona. También contamos con la posibilidad de habilitar hasta 23 lenguajes distintos para hacer el reconocimiento de texto.
los datos se almacenan en la agenda de la App y en los contactos del teléfono
Para probar la calidad del reconocimiento, conseguí un set de tarjetas de presentación de distintos colores y formatos y procedí a tomar fotos con un Moto G de primera generación, que ya sabemos que no tiene una cámara particularmente poderosa, y debo reconocer que los resultados fueron bastante buenos. En varias ocasiones en todo caso me vi obligado a repetir la toma de la fotografía para mejorar los resultados, pero los datos reconocidos fueron muy precisos.
Imagen: Flickr
