El debate por la publicidad en internet no podría estar más candente, pues coloca en un dilema a los internautas. Por un lado, los usuarios quieren contenido gratuito, de calidad y libre de anuncios, pero por el otro, muchos de los creadores de contenidos gratuitos se basan precisamente en los mismos anuncios para poder proveer dichos contenidos y generar ganancias.
La naciente popularidad de los bloqueadores de anuncios (ad blockers), ahora incluidos en forma nativa en muchos navegadores, está colocando de manifiesto un problema muy importante para Google, una compañía que deriva gran parte de sus ganancias de los anuncios, y es que los usuarios muchas veces se sienten obligados a instalar este tipo de ad blockers, cuando la experiencia de navegación se torna muy negativa por culpa de sitios con exceso de publicidad.
“Los anuncios, buenos y malos, ayudan a financiar la web abierta. Pero el 69 por ciento de las personas que instalaron ad blockers dijeron que estaban motivados por anuncios molestos o intrusivos. Cuando los anuncios se bloquean, los editores no ganan dinero”, menciona Scott Spencer director de gestión de productos de Google.
50% de los usuarios odian los Popups
Para mitigar este problema, y ayudar a los creadores de contenidos a mantener experiencias de anuncios balanceadas que generen ingresos, pero sin molestar la experiencia de uso, Google lanzó en junio un utilitario que permite a los propietarios de páginas web, realizar un análisis de su sitio y determinar si la experiencia de anuncios tanto en la versión de escritorio como en móviles es agradable.
97% de las violaciones a una buena experiencia de anuncios, son causadas por los Popups
“La buena noticia es que la gente no odia todos los anuncios, sólo los que son molestos. La sustitución de anuncios molestos por otros más aceptables ayudará a asegurar que todos los creadores de contenido, grandes y pequeños, puedan seguir sosteniendo su trabajo con la publicidad en línea”
La noticia esta semana, es que Google está por comenzar una nueva etapa relacionada con esta estrategia, en la que comenzará a enviar notificaciones de alerta a aquellos portales que presenten una experiencia negativa de anuncios para sus visitantes. Lo que no queda claro de momento, es si Google tomará acciones negativas contra aquellas páginas que no corrijan sus problemas, pero podríamos esperar que su ranking en los resultados de búsqueda, se vean severamente afectados.
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