No ha sido un verano fácil para los estrenos cinematográficos de Hollywood, a pesar de fenómenos como Barbie y Spider-Man: Across the Spider-Verse, hubo estrenos como The Flash o Indiana Jones and the Dial of Destiny que se quedaron cortos en su desempeño. Y luego está Megalodón 2: El Gran Abismo.
Es un misterio, por decir lo menos, porque hablamos de una cinta que recibió una calificación de 0% en el agregador Rotten Tomatoes el día de su estreno, y que ha sido absolutamente despedazada por la crítica, que la ha calificado de “totalmente absurda” y “el colmo de la estupidez”.
Pero también es un éxito de taquilla, que ya duplicó en recaudo los 130 millones que costó su producción. Incluso más diciente es que, desde su estreno el 4 de agosto, su puntaje en Rotten Tomatoes ‘rebotó’ a 72% en la calificación de la audiencia, aunque la nota de la crítica sea apenas de 28%.
Meg 2 es un blockbuster chino
Las razones del éxito de Megalodón 2 pueden rastrearse a varios frentes, pero para hallar la principal, hay que mirar hacia China. Al igual que la también comercialmente exitosa primera cinta de 2018, esta es una coproducción chino-estadounidense. En consecuencia, está fuertemente orientada al mercado chino, con diálogos en mandarín, una banda sonora con canciones en ese idioma y, muy importante, una estrella china como Wu Jing en un papel principal.
Es por eso que, aunque la película ganó más de 30 millones de dólares en EEUU el fin de semana de su estreno, remontó las tablas de recaudación gracias a 112 millones de dólares provenientes del extranjero, de los que una gran parte se recaudó en China.
Cabe señalar que China rechaza muchos éxitos de taquilla estadounidenses y una buena manera de sortear los obstáculos es incorporar talentos chinos. Meg 2 va más allá y, de hecho, es considerada una película china producida para una audiencia global.
Pero, decíamos, hay muchas otras razones. Así que vamos a repasar los aspectos más relevantes en este debate:
1. Un reparto estelar
Meg 2 trae de vuelta a Jason Statham como Jonas Taylor, y esta vez el buceador aventurero, al que la cinta se permite describir como un "James Bond verde", enfrentará más de una bestia marina.
Junto a él regresan, del reparto de la cinta original, Cliff Curtis y Page Kennedy. También regresa la actriz infantil Sophia Cai como Meiying Zhang, pero no así Li Bingbing, que interpretó a su mamá en la primera película y fue inexplicable e inexplicadamente eliminada en la continuación.
Pero como decíamos, mucho del star power de la cinta lo pone el actor chino Wu Jing, que da vida a Jiuming, uno de los investigadores principales en la misión. Se trata, nada menos, que de uno de los actores más prolíficos de China, especializado como Statham en las películas de acción y a quien audiencias occidentales quizá recuerden por su actuación en The Mummy: Tomb of the Dragon Emperor.
2. Un presupuesto ‘razonable’
Puede que no lo parezca, cuando dijimos ya que su costo ascendió a los 130 millones de dólares, pero Megalodón 2 es uno de los éxitos de taquilla más baratos del año.
La razón por la cual 260 millones son suficientes para considerarla un hit es que esta película no tuvo un megapresupuesto que recuperar y por eso, aunque cintas como Indiana Jones and the Dial of Destiny o The Flash recaudaron millones en taquilla, tuvieron también que recuperar sumas mucho mayores y se consideran fracasos.
Solo por comparar, The Flash costó 200 millones de dólares sin considerar el márketing y la más reciente Misión Imposible costó 291 millones.
3. Un derroche de efectos especiales
Las audiencias se han acostumbrado a esperar que los blockbusters del verano cinematográfico de Hollywood sean un derroche de efectos y Meg 2 no decepciona en ese apartado. Sobre todo porque, como corresponde a una segunda parte, esta vez la amenaza es mayor y -¿es spoiler si sale en el trailer?- ya no hay uno sino tres megalodones, además de una especie de kraken.
4. A quienes van a ver Megalodón 2 no les importan las críticas
La opinión de los críticos y los puntajes de Rotten Tomatoes no son siempre una lectura de las posibilidades de una cinta de triunfar en la taquilla. Puede que los críticos aborrezcan Meg 2, como lo sugiere su 28%, pero su 72% de favorabilidad del público (y ciertamente sus 260 millones al momento de escribir esta nota), demuestran que esta es una película, esencialmente, a prueba de críticas.
Quienes vieron The Meg en 2018 (y, si a eso vamos, cualquiera que haya visto el trailer o hasta el afiche) saben qué esperar de la segunda parte y no van a salir decepcionados.
5. Entonces, ¿no es “el colmo de la estupidez”?
Por supuesto que lo es. La película es absurda de comienzo a fin.
Los 116 minutos de esta cinta están plagados de acciones imposibles (como Statham nadando a 11.000 metros de profundidad sin ninguna clase de protección), errores de continuidad, decisiones inexplicables y fallidos intentos de humor. Sin embargo, las audiencias que querían más de lo mismo probablemente disfrutarán su clase de entretenimiento ligero y su indiscutible simplicidad.
Eso sí: La primera escena se devuelve a la prehistoria para mostrar a un megalodón devorando a un tiranosaurio, pero en realidad, los dinosaurios se extinguieron hace 65 millones de años y el megalodón dominó los océanos hace unos 25 millones de años. ¿Qué pasó ahí, Statham?