China se convirtió en el primer país en desplegar su bandera nacional en la cara oculta de la Luna, una hazaña que nadie había alcanzado en más de cinco décadas de exploración.
La sonda Chang'e 6 despegó el pasado 3 de mayo desde el Centro de Lanzamiento de Satélites Xichang en la provincia de Sichuan, China, a bordo de un cohete Long March 5. Este martes partió de la cara oculta de la Luna con un precioso cargamento, tras dos días recolectando muestras.
La cara oculta de la luna
La misión se centró en recolectar muestras de la región de la cara oculta de la Luna, una zona que aún no había sido explorada directamente por misiones anteriores.
Estas muestras serán transportadas de regreso a la Tierra para su análisis en laboratorios especializados, lo que permitirá a los científicos profundizar en nuestra comprensión de la Luna.
El video de la recolección de las muestras documenta, para citar a Armstrong, "un salto gigante" en la exploración de nuestro único satélite natural.
Además, se espera que el material recolectado proporcione información invaluable sobre la composición y la historia geológica de la Luna, arrojando luz sobre su formación y evolución a lo largo del tiempo.
Científicos, a la espera
Se calcula que el viaje de regreso a la Tierra de Chang'e 6 durará unas tres semanas y se espera que aterrice en la región china de Mongolia hacia el 25 de junio.
El éxito del lanzamiento de la sonda china es un testimonio del creciente dominio del gigante asiático en la exploración espacial. La misión es, además, un hito importante en la colaboración internacional, toda vez que contó con la participación de científicos de Italia, Francia, Suecia y Pakistán.
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