Las hoverboards fueron el tema favorito de conversación durante la navidad pasada, no solo porque de seguro fueron uno de los regalos más pedidos por los niños de todo el mundo, sino porque días después de la noche buena, empezamos a escuchar de casos de patinetas de dudosa calidad que se prendían en llamas debido a sus baterías recargables defectuosas.
Sea como fuere el termino hoverboard hace alusión a la fantástica patineta voladora que vimos flotar por las pantallas de cine en los 80s en Back to The Future con el joven Michael J. Fox haciendo uno de los papeles más importantes de su carrera actoral. Este tipo de patinetas flotantes es lo que todos queríamos ver para 2015, y a pesar de que las hoverboards no levitaron si se vendieron como pan caliente. Pero todo eso está por cambiar, pues Arca, una compañía especializada en vehículos aeroespaciales ha diseñado Arcaboard, la primera hoverboard comercial que realmente vuela.
Arcaboard es una hoverboard bastante voluminosa, en su cuerpo rectangular tiene condensados 36 potentes motores eléctricos que producen un enorme poder de elevación de hasta 272 caballos de fuerza, suficientes para elevar una carga de hasta 110Kg de peso por un espacio de tiempo de aproximadamente 6 minutos antes de agotar sus baterías. Los motores de esta patineta no son silenciosos así que deberás someter a tus vecinos a unos 92 decibeles de ruido cada que quieras dar un paseo en tu Arcaboard.
El Arcaboard podríamos decir que se trata aun de una prueba de concepto que seguramente irá evolucionando con el tiempo, sin embargo sus creadores han querido comercializar esta primera generación a quienes estén interesados y dispuestos a pagar $14.900 dólares por un corto paseo en la patineta voladora (unos 5.000 dolares mas económica que la primera generación). De otro lado, si no quieres esperar las 6 horas que demoran en cargarse las baterías de la Arcaboard, entonces puedes adquirir la ArcaDock, por otros $4.500 dólares, y regresar a la acción en solo 35 minutos de carga.
El Arcaboard funciona con un principio muy similar a las hoverboards que todos hemos visto en las calles. Posee un sistema de estabilización que se ajusta a los movimientos del cuerpo de la persona, haciendo posible moverse en cualquier dirección con solo inclinarse de un lado para otro. Esperemos que el concepto siga evolucionando y veamos dispositivos como la Arcaboard hacerse más pequeños, económicos y prácticos. Mira a continuación un vdeo donde sus creadores cuentan el proceso de creación de esta curiosa patineta.