Jimmy Pepinosa
EditorEl cielo nocturno tiene preparada una cita especial para este 8 de septiembre: la Luna y Saturno compartirán escenario en una conjunción visible poco después del atardecer.
Lo mejor es que se trata de un fenómeno que no requiere telescopios para ser apreciado, aunque con un poco de paciencia y el equipo adecuado se puede disfrutar en mayor detalle.
El encuentro se presentará durante la tarde-noche del lunes, cuando Saturno aparecerá muy cerca de la Luna en fase gibosa menguante, con más del 95 por ciento de su superficie iluminada.
Este gigante gaseoso se situará a menos de 5 grados de distancia de nuestro satélite natural, lo que equivale aproximadamente al ancho de tres dedos juntos vistos con el brazo extendido.
Ambos cuerpos se encontrarán sobre la constelación de Piscis, una zona del cielo poco llamativa pero que servirá como telón de fondo para este espectáculo. A simple vista, la Luna dominará con su brillo plateado, mientras que Saturno se distinguirá como un punto amarillento a su lado.
Cómo observarlo desde Colombia
(NASA)
En el país, el fenómeno podrá apreciarse mirando hacia el horizonte oriental poco después de la puesta del Sol.
Conforme avance la noche, la Luna y Saturno ascenderán en el cielo, haciéndose más fáciles de distinguir. La recomendación es buscar un lugar con buena visibilidad hacia el oriente y poca contaminación lumínica.
Quienes cuenten con binoculares podrán diferenciar con mayor claridad el disco del planeta y, en algunos casos, su característico resplandor anillado. Con un telescopio de al menos 200 mm de apertura, será posible incluso observar la División de Cassini, el espacio oscuro que separa los anillos principales de Saturno.
Más allá del dúo celeste
(NASA)
La cercanía visual entre Saturno y la Luna también abre la puerta a un ejercicio de exploración astronómica.
En las noches alrededor de la Luna llena, sus llanuras basálticas conocidas como maria resaltan con nitidez, permitiendo identificar a simple vista manchas oscuras que en realidad son antiguos mares de lava solidificada.
Además, para quienes dispongan de un telescopio, el encuentro puede tener un bonus: muy cerca de Saturno, a menos de 3 grados de distancia, también se podrá ubicar Neptuno como un tenue punto azulado.
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